Material: Plata italiana 925, con una pureza del 92.5%, reconocida por su durabilidad y su acabado brillante que realza cada detalle del diseño.
Piedras: Zircones de zafiro con una pureza del 955, cuidadosamente seleccionados para ofrecer un resplandor excepcional y un toque de color elegante.
Diseño: Cruz clásica, símbolo de fe y estilo, perfecta para complementar cualquier atuendo con un aire sofisticado y sereno.
Acabado: Pulido fino que acentúa la belleza natural de la plata y la intensidad de las piedras, otorgando un brillo duradero y una textura suave al tacto.